Al final, ayer, viernes, no hubo la dichosa lady's night por diversos motivos: falta de plata, otras citas (hay quien prefiere dejar plantadas a sus amigas y salir con el galán que te llama esa misma noche), frío, en fin... Como no hubo la lady's me fui a un cumpleaños.
En el cumpleaños había una niña de algo menos de un año, bien chiquita, que cogía todo, se metía todo a la boca, jugaba con el perro, preciosa... Y, claro, cuando llegas a una reunión donde casi nadie se conoce o todos están aclimatándose, nada mejor que un niño que distraiga a todos y se vuelva el centro de la conversación y de la atención. A mí me gustan los niños, menos que hace cinco años, pero me gustan; además, tengo un pegue impresionante para toda criaturita de menos de cinco años.
Pero ¿a qué viene todo esto de los niños? Más allá de lo anecdótico, cuando ves tus amigas, a la gente de tu edad de mamá, siempre te pones a pensar cuándo me tocará a mí. Es extraño, pero seguramente en esta década eso se decida y nunca sé si estaré preparada, si seré una buena madre. Es más, ni siquiera sé si quiero ser madre, mientras el reloj bilológico de una u otra manera irá caminando y recordándome que ya no tengo veinte años y que mi cuerpo cada vez será menos 'amigable' para albergar otro cuerpo. Sigo elucubrando...
La verdad sé que, pese a todo, aún es bastante temprano para ponerse a pensar en eso, al menos eso creo. Hace algunos días hablaba con mi jefe y me preguntaba cuándo pensaba tener hijos. Yo le dije lo que le digo a todo el mundo: todavía tengo muchas cosas que hacer en la vida antes de tener un hijo, porque creo que hay que ser muy generoso para eso y todavía pienso demasiado en mí. No sé si sea una buena respuesta, pero es mi respuesta. De verdad pienso que hay un millón de cosas que hacer, pero ¿cómo sabré cuándo es el momento? Mientras lo sepa, seguiré estirando el elástico del tiempo y postergándolo. De todas maneras, hasta dejé morir la única planta que tenía.
En el cumpleaños había una niña de algo menos de un año, bien chiquita, que cogía todo, se metía todo a la boca, jugaba con el perro, preciosa... Y, claro, cuando llegas a una reunión donde casi nadie se conoce o todos están aclimatándose, nada mejor que un niño que distraiga a todos y se vuelva el centro de la conversación y de la atención. A mí me gustan los niños, menos que hace cinco años, pero me gustan; además, tengo un pegue impresionante para toda criaturita de menos de cinco años.
Pero ¿a qué viene todo esto de los niños? Más allá de lo anecdótico, cuando ves tus amigas, a la gente de tu edad de mamá, siempre te pones a pensar cuándo me tocará a mí. Es extraño, pero seguramente en esta década eso se decida y nunca sé si estaré preparada, si seré una buena madre. Es más, ni siquiera sé si quiero ser madre, mientras el reloj bilológico de una u otra manera irá caminando y recordándome que ya no tengo veinte años y que mi cuerpo cada vez será menos 'amigable' para albergar otro cuerpo. Sigo elucubrando...
La verdad sé que, pese a todo, aún es bastante temprano para ponerse a pensar en eso, al menos eso creo. Hace algunos días hablaba con mi jefe y me preguntaba cuándo pensaba tener hijos. Yo le dije lo que le digo a todo el mundo: todavía tengo muchas cosas que hacer en la vida antes de tener un hijo, porque creo que hay que ser muy generoso para eso y todavía pienso demasiado en mí. No sé si sea una buena respuesta, pero es mi respuesta. De verdad pienso que hay un millón de cosas que hacer, pero ¿cómo sabré cuándo es el momento? Mientras lo sepa, seguiré estirando el elástico del tiempo y postergándolo. De todas maneras, hasta dejé morir la única planta que tenía.
2 comentarios:
Primero, destesto cuando a ultima hora me cambian los planes, sobre todo cuando los cambian por alguien mas! o por el frio? ni que hubira tormenta de nieve y hielo (aun asi nos dimos formas de salir!).
Segundo, quizas somos medio contemporaneas, y la verdad que hace 10 años me sentia mas 'lista' para la maternidad que hoy.
Quizas era porque a) me gustan los niños, sobre todo chiquitos y bebes b) porque no andaba en ninguna relacion que peligre en matrimonio e hijos d) porque estaba cerca de mi madre, el resto de la gran familia y amigas.
Hoy por hoy, es posible que el dia este cerca. Llevo un matrimonio que despues de 7 años con muchos alti-bajos ha llegado a buen lugar, y tengo una pareja que no habla mas de que cuando estare lista para tener nuestro primer hijo. Me emociona la idea! porsupuesto, pero como tu, no me siento lista. Me siento una adolescente atrapada en un cuerpo que le dobla la edad. Una guambra que le encanta la farra y hacer con su tiempo lo q le de la gana. Un cuerpo que le encanta el chupe. Una persona que se esta re-encontrando y que encima mas esta lejos de todo el mundo.
Nose como miercoles sera que lo voy a lograr...........we'll see right?
Gringuita:
Tienes razón, yo siempre me pregunto cómo saber cuando sea el momento, aunque la verdad creo que asì cpmo listas listas no estaremos nunca, al menos conscientemente. En fin, un abrazo y graccias por venir.
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